Si en una boda no puede faltar el arroz y un ¡Vivan los
novios!, tampoco puede faltar un elemento indispensable como un álbum de fotos.
La tarea fue “costosa” porque el álbum va a juego con su
caja y era la primera que hacía. Modestia aparte, ¡el resultado me gustó!
Después de hacer la caja y forrarla con papel texturizado de ARTEBENE, añadí
en la tapa cinta beige que está colocada sobre cinta de grosgrain color marrón,
terminando con un lacito y dos alianzas.
El álbum, también sobrio, lleva una lazada de raso, las etiquetas con el nombre de los
contrayentes y fecha del evento, son framelits de Sizzix.
Vista de la primera página del álbum.
El conjunto y, como detalle,
una vela también a juego.
Eva
Muy elegante y precioso!
ResponderEliminarGracias, Silvia! :)
EliminarMuy fino. Me encanta
ResponderEliminarGracias, Ineslar :)
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